Cuando en algún lugar te encuentras con alguna gaviota, estate seguro que el mar no está lejos, ellas lo anuncian con su presencia. Te las puedes encontrar en el tejado de una casa incluso en pueblos y ciudades que no son costeros

vigilan con atención por si hubiera comida cerca ya que siempre tienen apetito

y aquí tenemos a esta gaviota que echa a correr para mostrarnos el camino hasta el mar

y allí nos encontramos con una gran cantidad de ellas

algunas están instaladas en un buen sitio para la observación


mientras otras aprovechan para asear sus plumas


hay días en las que son las únicas ocupantes de la playa

y se acercan al agua para darse un baño con total tranquilidad




pero si hay algo que siempre esperan las gaviotas, es comida. Esperan sin dejar de observar todo lo que ocurre a su alrededor


y cuando ven llegar una bandada de patos ellas se lanzan porque sospechan que allí hay alimento


y hasta un gorrión se apunta al banquete

y a la hora de despedirse, nuestra gaviota guía se aleja nadando en el inmenso mar disfrutando del silencio y de la brisa marina

¡Gracias María, Chelo y Lucía por estas hermosas fotos!