domingo, 29 de julio de 2012

Paisajes de mi tierra

Pensé que esta semana sería bueno que subiéramos a la montaña para contemplar algunos paisajes de mi tierra. Esta vez no hacen falta palabras, dejemos que nuestros ojos los recorran sin prisas empapándonos de su belleza.












¡Gracias Esther por las fotos!

domingo, 15 de julio de 2012

Kea y avefría


Hoy nos visitan otras dos aves de las antípodas el kea y el avefría, así iremos conociendo aves que quizás no encontraremos en nuestro país.

El kea es de la familia de los loros, ave endémica de la zona alpina de la isla sur de Nueva Zelanda. Alcanza los 46 cm. Es de color verde oliváceo, con el obispillo (parte superior de la cola) y la parte inferior de las alas de rojo brillante. Y característico es su poderoso pico. Es una de las pocas especies de loro capaz de vivir en regiones alpinas.


El kea es atrevido y ruidoso, lanza gritos y silbidos estridentes. Se alimentan de bayas y brotes y también de insectos y huevos. Por la zona tienen fama de asesinos de ovejas, pero aunque se alimenten de alguna oveja muerta o puedan matar a alguna enferma pocos casos hay de que ataquen al resto.



En lo que si se porta un tanto traviesillo el kea es en que en los aparcamientos de las estaciones de esquí donde es fácil verlos, causan destrozos en los coches arrancando con su fuerte pico las gomas de las ventanillas, los limpiaparabrisas e incluso llegan a veces a pinchar las ruedas.


Y aquí tenemos al avefría enmascarada, conocida también como chorlito enmascarado. Suelen vivir en los humedales pero no tienen problema para adaptarse a otras zonas más áridas. También se las puede encontrar en las playas y costas.



Su plumaje no es llamativo, tiene las alas y la cabeza marrón y el cuello y el resto del cuerpo blanco a excepción de una raya negra. Lo más llamativo es la máscara amarilla que luce entre el ojo y el pico.





Se alimenta de gusanos e insectos por lo que pasa la mayor parte del tiempo en el suelo dedicado a buscarlos



¡Gracias María por las fotos!

domingo, 8 de julio de 2012

Una familia de gorriones


Hoy gracias a las fotos de Nina nos vamos a acercar a una familia de gorriones y durante un momento compartiremos su día a día.

Los gorriones están tan adaptados al medio urbano que viven entre los humanos con mucha menos desconfianza hacia este que en el ambiente rural, así que los solemos encontrar incluso en nuestras ventanas, tejados o jardines



Son aves pequeñas pero bastante alborotadoras por lo que a pesar de tener un plumaje de colores poco llamativos no pasan desapercibidos. 

Tienen las patas cortas y pico cónico, grueso y fuerte. El plumaje del lomo es pardo con manchas negras y rojizas y el resto del cuerpo es de color gris. Los machos lucen una mancha negra en forma de babero que le cubre parte del pecho y la garganta. Las hembras tienen los colores un poco mas apagados y no poseen esa mancha, así que es fácil distinguirlos.


Su carácter alegre y alborotador no les quita de ser agresivos a la hora de proteger el nido tanto si el que les molesta es  de otra especie o de la suya, los machos atacan a otros machos y las hembras a otras hembras.

Cuando bajan al suelo en busca de comida se mueven dando pequeños saltos. Se alimentan de insectos y semillas aunque no hacen ascos a otros tipos de comida.

Y ahora vamos a acompañar a la hembra que va en busca del sustento para sus gurriatos que así se llaman sus crías.

Parece que encontró algo interesante que llevarles y ahora volará presurosa hasta el nido


en donde los gurriatos esperan impacientes


contemplemos la escena porque merece la pena







cuando la comida se termina la madre sale volando a buscar más porque los peques quedaron con hambre


y se para con una vecina quizás queriendo informarse de donde encontrará mas alimento


Mientras el macho vigila la escena y como no, también si nosotros nos marchamos pues no le gusta vernos tan cerca del nido.


Así que nos despedimos por esta vez.

¡Gracias Nina por esta serie de fotos!

domingo, 1 de julio de 2012

No se que pensar


El arte topiario consiste en crear y mantener un árbol o un arbusto con una forma determinada. No voy a poner en duda que algunos jardineros son verdaderos artistas a la hora de formar figuras, pero en mi mente ronda una pregunta ¿no es esto una especie de maltrato para las plantas?

Veamos en que consiste este arte. Normalmente se utilizan árboles y arbustos de hoja perenne procurando que sean especies de hojas pequeñas y de crecimiento compacto. Entre los árboles los más utilizados están el ciprés, el tejo, el laurel y el leilandi y entre los arbustos el preferido por su compacidad y crecimiento lento es el boj, pero también se utiliza el acebo, la hiedra o el mirto.

Para las formas de animales se suele hacer un armazón de malla metálica que cubra la planta y luego cuando esta crece se va cortando todo lo que sobresale de dicho armazón y para dar a las ramas la dirección adecuada se usa alambres.

Esto obliga a una poda frecuente para recortar todo brote que sobresalga de la forma deseada pues si no se hiciera estropearía la figura que se quiere representar. Y aquí es en donde entran mis dudas y me pregunto ¿es justo modificar una planta cortándole continuamente los brotes y haciéndola crecer hacia formas determinadas? El que las plantas no se quejen ¿quiere decir que no sufren?

Os dejo a continuación unas cuantas fotografías que fueron hechas en el Bosque Encantado que se encuentra en el municipio madrileño de San Martín de Valdeiglesias y me gustaría que me dierais vuestra opinión sobre lo que pensáis de este tipo de arte.












¡Gracias María por estas fotos!